martes, 1 de junio de 2010

El canario madrileño que primero fue canaria

Pues resulta que existen razas de cánidos a los que, tal vez por estética, sus dueños cortan las orejas ... No por completo, evidentemente, sino únicamente la parte más puntiaguda ...

Y mientras leo con atención las expertas aclaraciones sobre tal asunto resulta que viene a mi memoria un canario cordobés de adopción pero madrileño de nacimiento y que antes que mariposa fue gusano y fue capullo ... digo ... que antes de ser canario fue canaria. ¿Que cómo es esto? Pues os lo explico.

Vino de Madrid en un SEAT 131 color verde, pero no ese verde desteñido que tenían los Supermirafiori sino más bien un verde Benetton algo oscurecido (un día de estos hablaremos sobre el SEAT 131 con motor diesel Perkins). Y a todos nos parecía algo tímido aquel canario pues en ningún momento cantaba. Pasaban las noches y los días y el pajarito de bello plumaje no emitía sonido alguno. Inquietos por su actitud y ante el temor de algún problema de corte fisiológico y/o psicológico (ahí lo llevas) decidimos consultar con su criador ... Y resultó que no era canario sino canaria. Y resultó IGUALMENTE (lo pongo en mayúsculas sólo por "chinchar" a la fan número 1 de mis "igualmentes") que la hembra del canario -por alguna razón que jamás investigué- no canta.

Así que el criador diligentemente sustituyó a la canaria por un canario de similares características ... bueno, igual, igual, igual, tampoco era ... más que nada porque este nuevo individuo sí que hacía gorgoritos de vez en cuando.

Heredero del nombre de su predecesora diose en llamar IGUALMENTE Pirri (sí, sí, en honor al afamado futbolista y sí, sí, la canaria se llamaba Pirri, entre otras cosas, porque no sabíamos que fuese hembra) aunque en su caso el primer trayecto desde Madrid (de donde también era oriundo) lo realizó en un RENAULT 7 color crema.

Cuan dura y difícil puede llegar a ser la vida de un ser alado, nacido para surcar los cielos pero finalmente confinado en un reducido habitáculo rodeado de barrotes de hierro. Sin interacción posible con individuo alguno de su especie y sometido a vejaciones y maltratos propios de los penales más oscuros de nuestra historia.

A veces pienso ... si la reencarnación es posible ... prefiero mil veces reencarnarme en perro y saber que nunca podré volar antes que reencarme de nuevo en ave prisionera ... Otras veces simplemente vuelo sin pensar en nada más ...
5 ostrillizos: El canario madrileño que primero fue canaria Pues resulta que existen razas de cánidos a los que, tal vez por estética, sus dueños cortan las orejas ... No por completo, evidentemente, ...

3 comentarios:

Unknown dijo...

Siempre me han dado una pena terrible los pájaros enjaulados, por mucho que canten, me pongo en su lugar y me vienen mil tentaciones de abrir esa pequeña puertecilla metálica y devolverles la libertad.
Recuerdo el Seat 131 como un cochazo, un amigo tenía uno color "salmorejo"al que no le habían quitado los plásticos de fábrica para no mancharlo...y el coche soñado de mi infancia fue el Renault 7 familiar. De él bajaban las familias numerosísimas de la época: ni cinturones, ni climatizador, ni airbags, ni autovías, 4 niños en el maletero, unos bocatas y a cruzarse media Península de una sentada para llegar a cenar a la playa.

Violet dijo...

Escoge bien la raza de canino que te gustaría ser, no se vaya a dar la casualidad de que corras la "misma suerte" de ser modificado estéticamente... o por otro lado, más que la raza, el dueño, sus costumbres e ideales... al igual que sus características (las del animal, {el canino})ya que cada perro, tiene su propio instinto, de caza, de compañía, de presa, guardianes, de rebaño, guía... etc etc etc.
Parece mentira, que aún criados todos por la misma persona, cada uno, tire por su lado, más o menos inclinado y pronunciado.

ostrillizos dijo...

Hélène: estuve tentado en más de una ocasión de abrir aquella puertecilla metálica, pero un día comprendí que fuera de su jaula un ave como ésta tendría muy pocas probabilidades de sobrevivir así que tras colocar en la balanza una condena a "cadena perpetua" frente a la "pena de muerte" ... tras mucho sopesar la situación decidí que siempre es mejor seguir existiendo aunque sea de forma cautiva.
Sobre los coches de la época ... tenían algo muy especial ... quizá su fuerte no era el diseño, el aspecto exterior o las comodidades (¿tenían alguna?), pero no sé ... eran genuinos, distintos y auténticos, cada uno a su manera.

Violet: si la reencarnación está condicionada por nuestra última existencia entonces no existirá posibilidad alguna de elección. No podré elegir ser ave, can o felino, mucho menos la raza y menos todavía el dueño. Como creo que ya he sido león, koala y perezoso, tal vez si lo hago medianamente bien en esta vida actual puede que en la próxima me toque ser gota de lluvia, nogal o cuerda de la guitarra de un genio cordobés que asombre al mundo con su talento.

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