martes, 8 de junio de 2010

Para este viaje ...

Dice el saber popular aquello de "para este viaje no hacen falta alforjas" y entiendo yo que más de un incondicional del Real Madrid de Baloncesto estará pensando algo así.

Nunca me podrá alegrar una derrota del conjunto blanco, aunque esa derrota venga a confirmar todo lo que sostiene quien suscribe desde hace ya casi un año, pero esta derrota espero yo que tenga alguna consecuencia positiva. Y es que ... cuando las cosas se empiezan a hacer mal lo más probable es que acaben terminando muy pero que muy mal ... por eso es mejor empezar a hacerlas bien.

Joan Plaza Durán (sobre quien tengo un enorme post pendiente) llegó al Real Madrid en la temporada 2005-2006 como entrenador ayudante -por petición expresa de Bozidar Maljkovic- tras haber desempeñado idéntica labor junto a Aíto García-Reneses en el Joventut de Badalona durante las anteriores campañas. Ese año a Maljkovic (artífice de la mayor revolución que yo recuerde en el equipo baloncestístico del club de Concha Espina) se le fue totalmente la cabeza y decidió que eso de jugar con un "base puro" no era algo imprescindible. Como consecuencia ... fue el propio equipo quien también perdió la cabeza. Y jugar "sin cabeza" es un auténtico suicidio en un juego tan exigente a nivel mental-táctico-estratégico como el baloncesto.

Por eso en la temporada siguiente, 2006-2007, los nuevos rectores del club (los miembros de la directiva presidida por Ramón Calderón) tenían muy claro que el principal objetivo para la sección era recuperar la "cabeza" o la cordura que se había perdido totalmente el año anterior. Y para conseguir tal objetivo se pasaron un verano entero sondeando el mercado, tanteando a entrenadores de altísimo nivel, tratando de seducir sin éxito a históricos como Aíto ... y al final no quedó más remedio que conformarse con el entrenador ayudante, Joan Plaza, que pasaría a ser el principal ... como solución transitoria.

Plaza continuó y perfeccionó el espíritu de "los gladiadores de Maljkovic" y dió un paso de gigante en la recuperación de la comunión entre público y equipo que por desgracia había tocado mínimos históricos poco tiempo atrás.

Se hizo acompañar por Zan Tabak (quien desde aquel momento se convirtió en su inseparable ayudante) y pidió los fichajes de Raúl López y Álex Mumbrú (que volvían a casa), la recuperación de Edu Hernández-Sonseca y la incorporación de Kerem Tunçeri y Charles Smith. Con estos mimbres se marchó (a finales de agosto) a Andorra donde empezó a construir un equipo que en su primera temporada se proclamaría campeón de la fase regular (de la que fue absoluto dominador) y ganador a la postre de la Liga ACB, así como campeón de la Copa ULEB (fusión de las extintas Recopa de Europa y Copa Korac). Todo ello supuso el reconocimiento unánime del técnico como "entrenador del año" en ambas competiciones, convirtiéndose igualmente en el mejor entrenador español debutante en la historia de la liga. El único "pero" fue la Copa del Rey, pecado venial comparado con los éxitos conquistados.

Con esta base y forzado a realizar algunos ajustes en la plantilla fundamentalmente por motivos económicos, Plaza consiguió revalidar el campeonato de la fase regular de la liga ACB en la temporada 2007-2008 al tiempo que el equipo realizaba un papel bastante digno en la Euroliga (máxima competición continental). No obstante, un sistema de competición totalmente injusto dió al traste con las aspiraciones blancas en el playoff final de la liga, cayendo eliminados injustamente frente a un Unicaja al que casi siempre asiste la fortuna de manera descomedida. La Copa del Rey por su parte -aunque el Madrid partía como el más claro favorito- volvió a atragantarse, pero no pasaba nada.

Y seguimos trabajando. Llegó la temporada 2008-2009 y escarmentados por el varapalo del año anterior se decidió rediseñar la planificación de la temporada: de nada vale ser los mejores durante todo el año si luego se pierde el primer partido del playoff. Y la campaña al final no fue muy buena. Sin embargo el Madrid se despidió de la competición en Vistalegre, en el cuarto partido de la semifinal forzando un quinto que se disputaría en Vitoria, entre aplausos de su público tras arrollar a un Tau que se presentaba en la capital como claro candidato a conquistar un título que probablemente no pudo ganar debido al enorme desgaste que supuso para ellos eliminar al Real Madrid.

Dignidad y saber estar en las victorias ... y aún más en las derrotas.

Llegaron las elecciones y volvió Florentino. Y los incondicionales blancos (ya en el playoff, antes de su nombramiento como presidente) le pidieron un esfuerzo económico para volver a reforzar a un equipo que lo necesitaba (sobre todo para ser nuevamente competitivos en Europa). Y Florentino -que yo creo que no sabe nada de baloncesto- decidió poner al frente de la sección a Antonio Maceiras (ex-entrenador y ex-coordinador de las categorías inferiores así como ex-manager general de la sección de baloncesto del F.C. Barcelona), buscar un entrenador que tuviese un palmarés respetable en Euroliga y fichar a Ricky Rubio, que a él le sonaba que debía ser bueno.

No se pudo seducir a Ricky con dinero pero sí se consiguió fichar a Ettore Messina al tiempo que se daba salida por la puerta de atrás a Joan Plaza, Raúl López, Álex Mumbrú y Axel Hervelle. Se fueron también -con todo merecimiento- Papadopoulos (¡qué vergüenza de personaje!), Massey (que nunca rindió al nivel que se deseaba) y Winston (que tuvo que venir a mitad de temporada para sustituir a un Quinton Hosley, quien faltó al respeto a Joan Plaza y eso -faltar al respeto a quien sea- es una falta imperdonable para el ténico barcelonés).

Y con Messina y muchos millones llegaron Prigioni (pésimo Prigioni, el jugador que más me ha defraudado esta temporada), Kaukenas (incomprensiblemente "cortado" para el playoff), Hansen (desgraciadamente lesionado en el tramo final de la competición), Dasic (y como vino se fue), Garbajosa (que ya tiene una edad), Vidal (en quien no se ha confiado hasta que no ha quedado más remedio), Velickovic (un futuro gran 4 forzado a jugar de 3 por miedo a un Mickeal al que ya no tendrá que enfrentarse), Lavrinovic (un malísimo jugador que regaló sus mejores días de basket al inicio de la presenta campaña), Jaric (¿? ¿qué decir de Jaric?), Tomic ("too young to die") y Almond (¿para qué vino Almond?). Junto a Iñaki De Miguel que en el ocaso de su carrera alternaba apariciones en el filial y en el primer equipo (en Euroliga por ejemplo ...).

Sin pies ni cabeza acaba una temporada con el siguiente resultado: finalistas (Messina mejora a Plaza) de una Copa del Rey que terminó ganando el Barcelona (títulos: 0), terceros en la fase regular de la liga ACB (igual que el año pasado, y el año pasado fue bastante malo, seguimos, títulos: 0), eliminados en cuartos de final de la Euroliga (y por tanto sin acceder a la Final Four, también como el año pasado, seguimos, títulos: 0), eliminados nuevamente en semifinales del Playoff final de la liga ACB a manos del Tau, perdón, Caja Laboral (títulos: 0).

Conclusión: los resultados son los mismos pero las sensaciones son mucho peores (la nula convicción en la victoria, por ejemplo, nos ha hecho perder más partidos que cualquier virtud de los equipos rivales) y los aficionados vuelven a estar cansados de que las cosas siempre tiendan a hacerse mal.

Nada, lo que decía el título de este post que "para este viaje" ... y si lo siguen haciendo así ... al final terminaré haciéndome socio del Granada que es lo que debía haber hecho hace ya tiempo.
5 ostrillizos: Para este viaje ... Dice el saber popular aquello de "para este viaje no hacen falta alforjas" y entiendo yo que más de un incondicional del Real Madr...

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